ALTO
¿FUERZA?:
Entre la desesperanza, falta de liderazgo creíble, un gobierno abusador sordo y corrupto, la avasallante hiperinflación que golpea la salud y el estómago de los venezolanos diezmando a la población y empujándola a huir del país, llegamos a la convocatoria ilegal de elecciones, adelantadas siete meses ante el temor de que a medida que pasan los días le va a ser mas difícil a Maduro contener un país que pide a gritos su salida del poder.
Controlando todas las instituciones del Estado –donde nunca en estas dos décadas hubo separación de poderes- se convoca la cita electoral denunciada por todos los demócratas del globo, la Iglesia venezolana y decenas de gobiernos que se adelantaron al señalar que no la reconocerán.
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